Vas al súper, tomas un carrito para llenarlo de comida, pasas por la caja registradora pagas y regresas a casa. Al final de mes, sacando cuentas de los gastos y te das cuenta de que algo no está bien, has gastado de más en comida. Y la pregunta del millón es ¿Cómo ahorrar en la compra de alimentos?
El gasto mensual de un español en comida oscila entre los 150 y 450 euros, tanto en casa como fuera de ella. Sin embargo, se puede reducir y ahorrar en la compra de alimentos si se hace de manera consciente.
Para ahorrar en la compra de la comida, lo primero que debes hacer es organizarte y establecer un presupuesto. Así como también ser realista sobre lo realmente necesitas en casa y que puedes dejar en el estante.
Para ayudarte a ahorrar te dejaremos algunos consejos de cómo gastar menos en comida y así cuidar tu gasto cuando vayas al mercado o al ‘súper’.
Establece un presupuesto mensual para las compras
Lo primero que debes hacer para reducir tus gastos es determinar exactamente cuánto quiere destinar a la compra de comida cada mes.
En este presupuesto de gastos, también dejar un apartado para otras compras necesarias como los productos de limpieza y los artículos de tocador.
- Puedes usar el sistema de presupuesto 50/30/20, este te ayudará a dividir tus ingresos de manera que cubras todas tus necesidades.
Este es un método es de uso común, y consiste en tomar tus ingresos mensuales y dividirlos en porcentajes. Con el 50% cubres tus necesidades primarias, para darte gustos utiliza el 30 %, y el 20% restante será para tus ahorros.
- Recuerda siempre dejar un poco del presupuesto para darte algún gusto, ya que cuando se está muy ajustado posible, es más fácil rendirse.
Organiza tus compras
Una vez tengas tu presupuesto establecido, es hora de organizar las compras de los alimentos. Y para ello, aquí tienes algunos consejos prácticos para organizarte y hacer tu lista:
- Haz un inventario de todos los alimentos que tienes en casa, de esta manera sabrás que hace falta en la alacena.
- Haz un menú de comidas, esto te ayudará a saber la cantidad de ingredientes que necesitaras para cocinar. Y así podrás promediar la cantidad que debes comprar para tu semana, o quincena.
- Al organizar el menú, calcula la compra de carnes por porciones y no por el peso. De esta manera evitarás comprar y cocinar de más, por lo que tampoco tendrás desperdicios.
- Agrega a tu lista de compra varias leguminosas, estas no solo rinden bastante y son baratas, sino que combinarlas con distintas proteínas. Un bien ejemplo son las versátiles lentejas que van muy bien con salchichas.
- Ten en cuenta para tu menú las frutas y vegetales de temporada, ya que estos suelen ser más baratos.
- Dales más protagonismo a los cortes económicos como falda, chambarete o la carne molida, esta última que es multifacética y siempre te saca de apuros. Deja los cortes como filetes y el lomo para ocasiones especiales.
- Pide el pollo entero, este suele ser más económico y puedes aprovecharlo por completo. Ya que con las menudencias enriqueces una buena sopa y el resto lo cocinas a tu gusto.
- Organiza tu lista, según los lugares que visites para hacer la compra de los alimentos, así también te ahorraras tiempo.
- Ten en cuenta el catálogo de ofertas de los supermercados para hacer tu lista, ya que allí publican los productos en promociones semanales o mensuales. Esto a la larga será un ahorro considerable.
E incluso basándote en las promociones idea algunas comidas del menú. Por ejemplo, si la carne molida está a buen precio puedes adaptar un rico guiso de albóndigas. De esta manera ahorrarás sin renunciar a preparar buen plato.
- Busca cupones para tener descuentos en algunos productos. En línea puedes encontrar varias páginas especializadas en ofertas, de igual manera puedes descargarte algunas apps que incluso te notifican cuando hay rebajas.
Consejos prácticos al hacer las compras
Llega el día de ir a comprar los alimentos, tienes el menú perfecto y la lista bien ordenada para salir. Pero hay algunos consejos que si tienes en cuenta pueden ahorrarte algo de dinero.
- Es muy importante que, al salir a comprar los alimentos, lleves el presupuesto calculado y exacto. De esta manera, evitarás gastar de más, así como también el impulso de agregar al carrito algún ingrediente que realmente no necesitas.
- Lleva un carrito para la compra, estos no solo son prácticos para cargar las cosas hasta el carro. Si no también te ayuda a no usar bolsas de plástico, por lo que te ahorras algunas monedas.
- Evita ir al supermercado con el estómago vacío, ya que esto puede influir en tu presupuesto. Si no has comido, tu cerebro te hará pensar en comprar más comida de la que necesitas. Y seguramente acabaras comprando algo para comer en el momento chucherías, galletas o aperitivos.
- Puedes evitar las compras impulsivas, haciendo un recorrido en la tienda según un patrón lógico. Al ir pasillo por pasillo y siguiendo tu lista, tan solamente pasarás por allí una vez, por lo que es menos probable que te salgas de tu presupuesto.
- Organiza exclusivamente ir a comprar una sola vez a la semana. Porque cuando lo haces sin planificación no eres consciente de cuanto gastas, se te complicará el ahorrar y serás más propenso a las compras impulsivas.
- No le temas a las Marcas Blancas, hay productos básicos como la harina o el azúcar que no disminuyen su calidad y que puedes conseguir a precios competitivos. Incluso algunas veces el fabricante es el mismo que el de alguna primera marca.
- Compra las verduras, frutas y vegetales en los mercados, no únicamente porque suelen estar frescos y orgánicos, sino que muchas veces compras directamente al productor por lo que te saldrá más económico.
Con estos sencillos consejos, no solamente te ahorras un poco de dinero en la compra de los alimentos, sino que incluso ganaras algo de tiempo. Ya que compraras rápido y sin mirar demasiado, evitando así las compras impulsivas e innecesarias.
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